Peter Benjamin Parker es hijo de Richard y Mary Parker, tras el fallecimiento de los mismos pasó a vivir y ser educado por sus tíos Ben y May Parker. Peter se convirtió en un joven estudiante, amante de la ciencia y que, durante una visita a una exhibición científica, fue picado por una araña que había sido expuesta a los experimentos radiactivos que allí se llevaban a cabo. Esto provocó que adquiriera poderes sobrehumanos: la velocidad, fuerza y agilidad proporcionales a las de una araña de su tamaño; un "sentido arácnido" y la habilidad de adherirse y desplazarse por cualquier muro o pared. Gracias a sus conocimientos en la ciencia Peter Parker descubre la manera de crear una sustancia parecida a una telaraña que hacia fluir a través de unos disparadores ubicados en sus muñecas.
En un principio tratará de usar estas habilidades para su propio beneficio y se introduce en el mundo de la lucha libre, adoptando la identidad secreta de Spider-man. Después de un combate, Peter es testigo del robo de la recaudación del día, dejando pasar indiferentemente al ladrón, sin hacer nada para evitar su huida. Cuando llega a casa, averigua que alguien entró en la casa y había asesinado al tio Ben. Peter, lleno de rabia, busca al homicida y cuando lo encuentra descubre que es el mismo ladrón que dejó marchar. Es entonces cuando comprende las palabras que su tío Ben le repetía para inculcarle el sentido del deber: "Un gran poder conlleva una gran responsabilidad".
Desde ese momento se convierte en Spider-man dedicando plenamente su vida a combatir la delincuencia.
En un principio tratará de usar estas habilidades para su propio beneficio y se introduce en el mundo de la lucha libre, adoptando la identidad secreta de Spider-man. Después de un combate, Peter es testigo del robo de la recaudación del día, dejando pasar indiferentemente al ladrón, sin hacer nada para evitar su huida. Cuando llega a casa, averigua que alguien entró en la casa y había asesinado al tio Ben. Peter, lleno de rabia, busca al homicida y cuando lo encuentra descubre que es el mismo ladrón que dejó marchar. Es entonces cuando comprende las palabras que su tío Ben le repetía para inculcarle el sentido del deber: "Un gran poder conlleva una gran responsabilidad".
Desde ese momento se convierte en Spider-man dedicando plenamente su vida a combatir la delincuencia.